E X O G E N O: Deuda Externa

 Con su deseo por distinguirse de la gestión anterior el régimen de Ruiz Cortines se planteó en los primeros instantes eludir recurrir al crédito externo, salvo en casos de absoluta necesidad, no obstante se ponía en marcha la política de impulso a la producción, se ha sido intensificando la implementación del financiamiento externo más que nada luego de 1953. 

Al concluir la guerra de Corea, el problema de la Báscula de Pagos retornó a surgir, puesto que había una recesión de carácter mundial.

 Al iniciarse el año de 1954 se decidió devaluar el peso de nuevo y se fijó la nueva paridad de 12.50 pesos por dólar. Una vez que con el objetivo de rehabilitar la economía nacional que había sufrido una caída en dicho año, se logró primordial robustecer las reservas monetarias y elevar el gasto público designado a la inversión en organizaciones paraestatales. Desde 1955, en qué momento se comenzó la política del desarrollo estabilizador y se plantearon las metas de la misma, el régimen de Ruiz Cortines tomó a la implementación del crédito externo como el medio fundamental imprescindible para el cumplimiento de tales fines que fueron primordiales.

1. Conservar la igualdad de los costos 
2. Para evadir el alza de costos 
3. Promover la acumulación de capital y la reinversión

Por consiguiente, pese a los fines iniciales de austeridad en el gasto público y de intentar de eludir el desmesurado adeudo exterior la necesidad de conservar y robustecer el aumento económico y la industrialización llevó al régimen hacia una totalmente nueva forma de dependencia.

Con el mandatario Miguel Alemán (1946-1952) al término de su mandato en 1952, el costo de la deuda estaba en 346 millones de dólares. A lo largo de el régimen del mandatario Adolfo Ruiz Cortínez (1952-1958) el costo de la deuda externa subió a 602,2 millones de dólares.