E X O G E N O: Inversión Extranjera Directa durante el sexenio de Ruíz Cortines
La inversión extranjera directa entró en una totalmente nueva fase a lo largo de el lapso de Ruiz Cortines con la característica de que embarcó nuevos sectores, se usarían ahora en la industria manufacturera, en el negocio relegando y en último término el interés por invertir en la minería, en la energía eléctrica, en la producción de bienes de consumo.
En la industria manufacturera esta inversión incrementó en un 20% que representaba sobre la inversión extranjera total a inicios de la década de los 50 a un 54% hacia 1960, en el negocio se otorgó además un aumento de la inversión extranjera aun cuando no ha sido tan destacable como en la industria. Empero lo cual sí tuvo suma trascendencia en el plano comercial ha sido la predominación de las prácticas estadounidenses en las gigantes tiendas de apartamentos y la utilización de tarjetas de crédito produjeron un monumental efecto más que nada en la clase media nacional.
La enorme copiosidad de la inversión extranjera directa en México obedeció a los incentivos de las políticas gubernamentales que interesadas en impulsar los avances de la industria en el territorio y modernizar su infraestructura manufacturera dieron apoyo a la inversión extranjera, con mínimas restricciones reglamentarias para eludir que dominaran zonas productivas nacionales. No obstante las autoridades aprobaban novedosas inversiones todavía una vez que estas favorecían a la sociedad de capitales nacionales y extranjeros.
La Canacintra avisó sobre los riesgos de admitir sin más a los capitales extranjeros, debido a que recurrían a prácticas poco honestas. Los burócratas norteamericanos vieron con recelo esta campaña y no faltó alguno que con algo de paranoia comentó que la Canacintra seguía de cerca la línea "comunista antiamericana"
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