El otro lado de la moneda: Pragmatismo principista durante el sexenio.
En este sexenio se puede hablar de una política de doble juego, puesto que se tomó una postura externa públicamente y al mismo tiempo una postura distinta en el ámbito privado Tal es el caso de la participación de México en los foros internacionales, en los cuales mantenía una actitud basada en sus principios tradicionales de política exterior y, en ocasiones, contraria a la posición de Washington. México se veía obligado a colaborar con Estados Unidos debido a su política, en ámbitos de seguridad y economía este estaba atado al vecino del norte. En la práctica y por debajo de la mesa, el gobierno priista mantenía una estrecha colaboración, pero debido a el contexto de la Guerra Fría eran cuestiones que no se discutían en los medios de comunicación. Por un lado, ante el público se rechaza el intervencionismo estadounidense, pero se colaboraba abiertamente en privado. Por un lado las administraciones priistas tuvieron muchos tintes de este tipo de política exterior, po...